Los tatuajes en enfermos

Todos sabemos en qué consiste el tatuaje, se trata de una técnica agresiva para el organismo, así que está claro que no todo el mundo puede realizarse una de estas obras en la piel. Existen algunas afecciones sanitarias que no nos permiten realizarnos uno de estos, por los riesgos que estas sumarían a los que este tratamiento conlleva. De todas formas, y como siempre, es aconsejable consultar a un médico.

AFECCIONES A TENER EN CUENTA.

• Anemia: La anemia es la escasez de glóbulos rojos en sangre, por lo que la coagulación y cicatrización enlentecen.

• Diabetes: Un diabético tiene mayor dificultad de cicatrización que una persona que no padece esta enfermedad, además de estar más expuesto a infecciones.

• Enfermedades cardiovasculares: Las personas que padecen enfermedades cardíacas y vasculares sometidos a tratamientos que, generalmente, ser realizan con anticoagulantes, dificultando la coagulación y cicatrización.

• Enfermedad de Von Willebrand: Es un trastorno hemorrágico hereditario que afecta la coagulación de la sangre.

• Hemofilia: Se trata de una enfermedad hereditaria que afecta a los hombres. Ocasiona severos problemas de coagulación sanguínea.

• Leucemia: Es un tipo de cáncer que ataca a las células productoras de los glóbulos blancos, encargados de las defensas.

• Trombocitopenia: El enfermo presenta una disminución de las plaquetas en sangre. El número de moretones y el sangrado aumentan.

• Várices: La aparición de varices indica deficiencias en la circulación sanguínea, por lo que no es conveniente tatuarse cuando se tienen, sobre todo en las zonas afectadas.

• VIH: La presencia de este virus produce la destrucción de los linfocitos, que son los encargados de combatir las infecciones.